Jugar es -o debería ser- el centro de la vida de cualquier niña y niño. Es a través del juego que descubren el mundo, aprenden a relacionarse, ponen a prueba su creatividad y crecen con confianza. Pero jugar no es un lujo: es un derecho universal, recogido en el artículo 31 de la Convención de los Derechos del Niño y Niña.
El 20 de noviembre, con motivo del Día de los Derechos de la Infancia, desde Fundesplai nos sumamos a la celebración con la campaña #DretalLleure, animando a todas las familias a recuperar la esencia del juego compartido, especialmente al aire libre, donde la naturaleza se convierte en escenario y compañera de aventuras. ¿Te sumas?
Para poner el foco en el juego y el ocio familiar, te compartimos 11 juegos de exterior tradicionales para disfrutar en familia, ideales para vivir momentos inolvidables en el parque, el bosque o el jardín. ¡Porque el mejor regalo que podemos dar a nuestros hijos e hijas es tiempo de calidad!
Beneficios de jugar al aire libre con la familia
El juego en el exterior y en movimiento tiene beneficios extra para la salud, el bienestar y el desarrollo: estimula el sistema inmunitario y las habilidades psicomotrices de los niños y niñas, fortalece los vínculos afectivos y familiares, potencia la creatividad, produce vitamina D, fomenta la actividad física y refuerza la conexión con la naturaleza.
Eso sí, es muy importante que los adultos os impliquéis en el juego para que sea una experiencia en familia completa, y llena de risas y diversión. Nuestro consejo, además, es tratar de jugar al aire libre durante todo el año, haga sol, frío, nube o calor, puesto que así activamos el cuerpo.
Cómo elegir juegos de exterior según la edad
Aunque muchos juegos de exterior pueden adaptarse fácilmente a diferentes momentos del crecimiento, es importante tener en cuenta las necesidades y habilidades de cada etapa para garantizar que todo el mundo pueda disfrutar del juego con seguridad y entusiasmo. Solo necesitarás adaptar el ritmo, el nivel de dificultad, la distancia, el espacio o las normas.
- De 0 a 3 años: en esta etapa el juego debe ser sensorial y muy libre. Prioriza juegos que impliquen explorar el movimiento, manipular elementos naturales (piedras, hojas o arena) o descubrir texturas y sonidos.
- De 3 a 5 años: añade retos más activos a través de juegos que impliquen correr, saltar, perseguir o imaginar historias.
- De 5 a 10 años: elige juegos con más reglas y estrategia como pequeñas carreras, juegos de equipo o actividades que impliquen equilibrios, coordinación y resolución de retos.
- A partir de 10 años: los niños y niñas más grandes buscan dinamismo y retos más complejos. Decántate por carreras creativas, gincanas, juegos de orientación o versiones más elaboradas con pistas y mapas.
11 juegos de exterior para jugar en familia
A continuación, encontrarás una selección de juegos tradicionales y sin grandes materiales para realizar el aire libre que pueden adaptarse a diferentes edades e intereses. ¿Sabías que también puedes utilizarlos como recurso para tus fines de semana en familia en las casas de colonias?
1. El escondite
Es uno de los juegos tradicionales más universales. En la naturaleza, los niños y niñas lo tienen más fácil para esconderse (¡cuanto más imaginativas sean, mejor!). Además, las risas están aseguradas cuando las personas adultas intenten colarse detrás de un árbol o arbusto.
🎯 ¿Cómo se juega? Una persona para y cuenta sin mirar hasta el número acordado. El resto se esconde. Cuando la persona acaba de contar, busca el resto del grupo. Si descubre a alguien, ambas corren hasta el punto inicial. Si llega antes quien para, elimina a la otra persona; en cambio, si llega antes quien ha sido descubierta, se salva.
2. Stop
El juego del stop es divertido y muy dinámico, con diferentes opciones estratégicas para los jugadores y jugadoras. Te invita a moverte mucho y a sudar un poco 😉. Te aseguramos que cuando los niños y niñas vean como los adultos intentan pasar por debajo de sus piernas, toda la familia reiréis.
🎯 ¿Cómo se juega? Una persona cuenta hasta 10 y comienza a perseguir al resto al terminar. Quien huye puede chillar «STOP!» mientras abre los brazos en cruz y las piernas para quedar protegido o protegida. Algún miembro de la familia debe salvarle pasando por debajo de sus piernas. Si cualquiera de nosotros queda capturado o capturada, esta persona pasa a parar y se intercambian los papeles.
3. Buscar el tesoro
El juego de buscar tesoros es probablemente tan antiguo como «El escondite». ¡Y sobre todo con muchísimas variantes! Hablamos de un juego que despierta la curiosidad y el espíritu de aventura, siendo aún más emocionante si se realiza en la naturaleza en un espacio estimulante.
🎯 ¿Cómo se juega? Una de las personas adultas esconde un objeto o juguete dentro de un espacio acotado según la edad de los pequeños y pequeñas. El resto debe buscar el tesoro.
¿Quieres añadir nuevas variantes? Puedes ir diciendo «frío o caliente», dibujar el mapa del tesoro para seguirlo, dejar pistas, buscar geocachings o incluso seguir indicaciones de dirección con los ojos tapados. ¡Creatividad al poder! Y si todavía quieres hacerlo más divertido, intercambia los roles y haz que sean los niños y niñas los que escondan el tesoro.
4. Seguir al rey o a la reina
Este es un juego muy conocido en el mundo de los esplais y resulta ideal para fomentar la creatividad, el equilibrio y la cohesión de grupo. Funciona muy bien en entornos naturales con rocas, troncos y desniveles.
🎯 ¿Cómo se juega? Para empezar, toda la familia debe colocarse en fila india. La primera persona hace movimientos libres (saltar, bailar, caminar a la pata coja…) y el resto debe imitarlo sin salir de la fila. Cada 1 o 2 minutos, quien va delante cambia la posición pasando al final de la cola, asegurando así secuencias variadas y muy divertidas. ¿El truco? Realizar movimientos originales para darle un toque estimulante a la partida.
5. Construir cabañas y hacer juego simbólico
Construir cabañas es una de las actividades estrella entre los niños y niñas. Especialmente cuando se encuentran en un espacio natural de forma relajada, puesto que tienen tiempo de exploración libre y experimentación.
🎯¿Cómo se juega? En el bosque, en la montaña o en la playa podemos utilizar elementos naturales (troncos, ramas, hojas, piedras, rocas…) para construir cabañas más o menos complejas.
La etapa de construcción en sí misma es ya un gran juego que estimula muchos aprendizajes, pero después el espacio puede convertirse en un escenario perfecto para el juego simbólico en familia: cocinitas con arena y hojas, historias de piratas, jugar al cuento de los tres cerditos… Las posibilidades son infinitas. ¡Déjate llevar por las ideas creativas de tus hijos e hijas!
6. Tierra, mar y aire
Es un juego sencillo muy popular en la infancia en la etapa de Educación Primaria, ideal para entrenar la agilidad y la atención. Funciona perfectamente en espacios exteriores y en familia hará que sea aún más divertido.
🎯 ¿Cómo se juega? Se delimitan tres zonas: tierra, mar y aire. Unas áreas que se pueden marcar con cambios de desnivel, tipos de suelo diferentes, troncos, un trazo en el suelo… Un miembro de la familia dice aleatoriamente una de estas palabras y el resto debe saltar rápidamente a la zona correcta sin equivocarse.
La idea es jugar con el ritmo, la velocidad y las combinaciones tantas veces como se desee para complicar el nivel de la actividad. Quien se equivoca queda eliminado o eliminada o espera al siguiente turno. ¡Es perfecto para jugar con grupos grandes de amistades o con otras familias amigas!
7. Organizar una carrera
Las carreras al aire libre son una apuesta segura y son ideales para activar el cuerpo y pasar un buen rato en familia. Lo único que tendrás que tener en cuenta es la edad de todas las jugadoras y el espacio.
🎯 ¿Cómo se juega? Basta con elegir un punto de inicio y uno de llegada. Y a partir de ahí ser originales con la propuesta: una carrera a la pata coja, haciendo de ranas, en zigzag, buscando hojas de colores, haciendo de cangrejos, con sacos, corriente de espalda, con los pies atados, en parejas, con obstáculos o incluso una carrera a «cámara lenta». ¡El reto es hacerla emocionante para todo el mundo!
8. Pica pared
Un juego clásico divertidísimo que, jugado en el bosque o en el parque, se convierte en una gran aventura. ¿Has jugado alguna vez en familia? ¡Ponte a prueba!
🎯 ¿Cómo se juega? Ante todo, debemos buscar una pared o un árbol que sea el lugar de parar. A continuación, uno de los miembros de la familia para y otros se colocan a unos 5-10 metros dependiendo de la edad de los niños y niñas. Empieza el juego y quien para pica con las manos diciendo: «¡Uno, dos, tres, pica pared, uno, dos, tres, ya!».
El objetivo del resto del grupo es conseguir acercarse a esta persona mientras no mira. Cuando se gira, todo el mundo debe quedarse quieto. Si alguien se mueve, vuelve al inicio. Por último, cuando alguien consigue tocar la espalda de quien para, esa persona intenta atrapar al equipo antes de que vuelva a la línea de salida. Si atrapa a un niño, niña o adulto, esta persona será la siguiente en parar.
9. La rayuela
Es un juego tradicional muy típico del patio de la escuela o el esplai. Trabaja el equilibrio, la motricidad, la coordinación y la concentración. Para jugar en familia solo es necesario encontrar un espacio exterior con una superficie plana.
🎯 ¿Cómo se juega? El juego consiste en saltar a la pata coja o combinando saltos sobre unas figuras geométricas dibujadas en el suelo, divididas en casillas del 1 al 10. Los trazados se pueden hacer con yeso de colores, piedrecitas o incluso troncos si estamos en la arena. Cada persona necesita una piedra pequeña que tendrá que arrojar dentro del primer cuadrado sin tocar ninguna línea. Y después recogerla a la pata coja excepto en las casillas dobles.
Y así sucesivamente hasta llegar al final del dibujo, donde daremos media vuelta y recogeremos la piedra sin perder el equilibrio en cada casilla. Si la piedra sale del cuadro o se pisa una línea, se pierde el turno. Lo importante aquí no es ganar, sino realizar un juego de superación personal y poner en práctica nuestra destreza. Si nos animamos unos a otros, ¡será muy estimulante!
10. Saltar a la cuerda
Un clásico atemporal que fomenta la coordinación, el ritmo y la resistencia física. Es perfecto para hacer ejercicio físico en familia al aire libre de forma divertida y dinámica.
🎯 ¿Cómo se juega? Con una cuerda larga que hacen girar dos personas por los extremos, se trata de saltar al mismo ritmo sin enredarse. El reto es ir entrando y saliendo saltando en la cuerda sin que esta deje de rodar. Hay muchas variantes posibles: saltar con una canción tradicional, saltar en grupo, dar saltos dobles, retos de velocidad, saltos con un pie…
11. Acrosport
Esta actividad cooperativa combina el equilibrio, la fuerza, la confianza, la cooperación y el trabajo en equipo. Practicarlo en familia refuerza el vínculo y permite descubrir nuevas formas de moverse juntos y juntas.
🎯 ¿Cómo se juega? El objetivo principal es formar figuras sencillas y adaptadas a la edad y al nivel de los y las participantes con nuestros cuerpos. ¡Siempre sin perder el equilibrio! Un deporte acrobático donde una persona hace de base y el resto debe construir la figura con cuidado y comunicación constante.
Por ejemplo, pirámides pequeñas, puentes humanos, etc. La coordinación entre todos y todas es clave para decidir qué posición ocupa cada persona y cuál será su forma final. Para inspiraros, podéis buscar tarjetas con figuras ya definidas o bien improvisar y hacer vuestras propias versiones.
Otros juegos y actividades para realizar en familia
¿Tienes ganas de salir a la naturaleza para pasártelo bien? No esperes más y disfruta de los juegos exteriores en familia que te proponemos aquellos días donde hace buen tiempo. Combinan diversión, aprendizaje y momentos compartidos al aire libre para que vuestros días libres sean educativos y divertidos a la vez.
Y recuerda: este 20N celebramos el #DretalLleure llenando las redes de imágenes de niños, niñas y familias disfrutando del juego. Sube la tuya y… ¡a jugar! 😉
